Ha sido un inicio de año cargado de buenas emociones, la vida me ha dado la oportunidad de tomar decisiones y el fin de semana pasado no fue la excepción. El sábado empezaba con dudas, 5 am... voy o no voy, aún sin vehículo se dificultaba la salida de la finca.
Dudas, malditas dudas... 15 minutos más y me pierdo de este viaje.
Llego a San Martín Chile Verde casi a las 9.30 am, tomo un pick up y me lleva hasta a El Mirador, ahhh que montañista tan suertudo!!! camino 10 minutos y estoy ya en la laguna. Un trozo de espejo enclavado en el crater de un extitnto volcán del altiplano de Guatemala.
Hay centro ceremoniales mayas (42 en total) algunas cruces de flores y gente, mucha gente... lugareños pasando el sábado con su familia que empiezan a hacer fogatas que deben estar listas para el almuerzo, parejas caminando, por allá a lo lejos unos rezos... me encanta el sincretismo!!!! que mezcla entre cristianismo y paganismo!!!... esa cruce de dioses siempre me ha hipnotizado, ver como jesús se mezcla en las oraciones con la santa tierra, el bosque y el cielo. Me gusta, pero no me interesa ahondar en el tema.
Platico con la familia con la que llegué y me cuenta que son de la capital y estarán de vuelta por la tarde.
Me quito la mochila y me tiro en la arena, comemos algo y duermo... ese dulce sueño que se disfruta al sentir el viento y el sol en tu rostro, no me he cansado y eso me hace sentir raro por estar en tan bello lugar... así que tomo la mochila (ya después del descanso no tan breve) y me dispongo a caminar, me despido de un par de gente y tomo rumba a las gradas....
Por que me vine para aca? estaba tan rico tirado en la playa y ahora estoy bañado en sudor a mitad de las gradas, se me olvidaba cuánto pesaba mi mochila!! me voy a acaminar un par de horas por los alrededores, llamo al grupo Kashem y me cuentan que estan llegan a Laguna Seca (entrada principal a la laguna) y decido esperarlos con el campamento montado en la playa.
Ese momento fue de paz... mucha paz... el viento poco a poco trago nubes de frio (?) y el clima se tornó helado, armé mi carpa, saco mi almuerzo y me ponco a leer el periódico... nada me molestaba, tal vez un poco el sol, tal vez el viento... pero... cuando han molestado??
La tarde transcurrió con mas o menos normalidad, conocí a una familia colombia (entre los más de 70 montañistas que aparecieron con Kashem), abracé a mis amigos y nos platicamos un buen rato con mi amiga y hermana de cordada Maite...
Ya en la madrugada el cielo nos regaló un baile de estrellas, era tan limipo el ambiente que si no fuera por el crater, las estrellas se hubieran tocayo con sus gemelas reflejadas en la laguna. Eso si, con el frío característico de la región. Estuvimos observando el cielo durante buen rato con los hermanos Samayoa (Pancho y Julio) y luego a las gradas para observar el amanecer con el fondo de los volcanes Santa María, Santo Tomás y Santiaguito (todos tomados de la biblia)
Al regresar al campamento, me tiré frente a mi tienda y empecé a preparar mi desayuno: frijolito, huevos y te... acompañado y compartiendo con buenos amigos, incluídos mis nuevos amigos colombianos que espero volver a ver en algún lugar.
Se fue un grupo para el volcán Siete Orejas y yo me quedé tirado ahi cerca de mi tienda, espero a que se vayan todos y poco a poquito empiezo a recoger mis cosas, no me quería ir. Ya a las 10.30 tenía todo listo, me despido de mi amigo Villatoro y paso por otras tiendas a decir adiós. Estaba todavía por ahi Maite y el abrazo quería que fuera eterno, va a NY y no se cuando volvamos a vernos... volteo y le doy un adiós nostálgico a la laguna, seguro que el otro año ella seguirá ahi... yo, no se.
Dudas, malditas dudas... 15 minutos más y me pierdo de este viaje.
Llego a San Martín Chile Verde casi a las 9.30 am, tomo un pick up y me lleva hasta a El Mirador, ahhh que montañista tan suertudo!!! camino 10 minutos y estoy ya en la laguna. Un trozo de espejo enclavado en el crater de un extitnto volcán del altiplano de Guatemala.
Hay centro ceremoniales mayas (42 en total) algunas cruces de flores y gente, mucha gente... lugareños pasando el sábado con su familia que empiezan a hacer fogatas que deben estar listas para el almuerzo, parejas caminando, por allá a lo lejos unos rezos... me encanta el sincretismo!!!! que mezcla entre cristianismo y paganismo!!!... esa cruce de dioses siempre me ha hipnotizado, ver como jesús se mezcla en las oraciones con la santa tierra, el bosque y el cielo. Me gusta, pero no me interesa ahondar en el tema.
Platico con la familia con la que llegué y me cuenta que son de la capital y estarán de vuelta por la tarde.
Me quito la mochila y me tiro en la arena, comemos algo y duermo... ese dulce sueño que se disfruta al sentir el viento y el sol en tu rostro, no me he cansado y eso me hace sentir raro por estar en tan bello lugar... así que tomo la mochila (ya después del descanso no tan breve) y me dispongo a caminar, me despido de un par de gente y tomo rumba a las gradas....
Por que me vine para aca? estaba tan rico tirado en la playa y ahora estoy bañado en sudor a mitad de las gradas, se me olvidaba cuánto pesaba mi mochila!! me voy a acaminar un par de horas por los alrededores, llamo al grupo Kashem y me cuentan que estan llegan a Laguna Seca (entrada principal a la laguna) y decido esperarlos con el campamento montado en la playa.
Ese momento fue de paz... mucha paz... el viento poco a poco trago nubes de frio (?) y el clima se tornó helado, armé mi carpa, saco mi almuerzo y me ponco a leer el periódico... nada me molestaba, tal vez un poco el sol, tal vez el viento... pero... cuando han molestado??
La tarde transcurrió con mas o menos normalidad, conocí a una familia colombia (entre los más de 70 montañistas que aparecieron con Kashem), abracé a mis amigos y nos platicamos un buen rato con mi amiga y hermana de cordada Maite...
Ya en la madrugada el cielo nos regaló un baile de estrellas, era tan limipo el ambiente que si no fuera por el crater, las estrellas se hubieran tocayo con sus gemelas reflejadas en la laguna. Eso si, con el frío característico de la región. Estuvimos observando el cielo durante buen rato con los hermanos Samayoa (Pancho y Julio) y luego a las gradas para observar el amanecer con el fondo de los volcanes Santa María, Santo Tomás y Santiaguito (todos tomados de la biblia)
Al regresar al campamento, me tiré frente a mi tienda y empecé a preparar mi desayuno: frijolito, huevos y te... acompañado y compartiendo con buenos amigos, incluídos mis nuevos amigos colombianos que espero volver a ver en algún lugar.
Se fue un grupo para el volcán Siete Orejas y yo me quedé tirado ahi cerca de mi tienda, espero a que se vayan todos y poco a poquito empiezo a recoger mis cosas, no me quería ir. Ya a las 10.30 tenía todo listo, me despido de mi amigo Villatoro y paso por otras tiendas a decir adiós. Estaba todavía por ahi Maite y el abrazo quería que fuera eterno, va a NY y no se cuando volvamos a vernos... volteo y le doy un adiós nostálgico a la laguna, seguro que el otro año ella seguirá ahi... yo, no se.
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