Mi compadre: y entonces?
Yo: entonces qué pendejo?
Mi compadre: dónde vamos a comer?
Yo: ya te llevó la chingada... te toca invitar esta vez...
Mi compadre: y donde me invitaste la otra vez vos pues?
Yo: ahhhh... acordate que nos hechamos un lujo de hamburguesas...
Mi compadre: y desde cuando las hamburguesas Berlín han sido un lujo?
Yo: desde que las como en Villa Nueva cuando nos zafábamos de clases del internado... me extraña!!
Mi compadre: vaa... tons te invito lo que comía cuando me zafaba de clases.
Una par de timonazos, entre zona 4 y 5....
mmmmm...
Yo: y adonde me llevás pues?
Mi compadre: relajate estrella que se a donde te llevo.
Yo: mejor ya no vamos, ya se me quitó el hambre.
Mi compadre: ohhhh, que chingás, ahora te aguantás, solo busco donde parquearme... quiero estrenar algo...
Yo: no, en serio... ya no tengo hambre viejo.
Nos paramos en una acera no muy concurrida...
Mi compadre: a ver, acá si comemos sin mancharnos...
Yo: uyyyyyy, que delicado.
Miren la chulada que se compro mi compadre!!! justo para poner los shucos del Liceo!!!!
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